Ese momento en el que te entra el miedo al futuro y renuncias a tus ilusiones y a lo que te apasiona en pos de lo que te da seguridad o de lo que se espera de ti, “porque es lo que todo el mundo hace”.
Ese es el momento que marca el final de estar vivo y el comienzo de empezar a morir.
Cambias una realidad donde todavía “todo es posible”, por otra donde el camino te viene marcado por otros.
Te adentras en la hipnosis colectiva y si alguna vez por un instante despiertas, tu vida duele tanto que recurres tu mismo a la auto-hipnosis: ¿qué harán los demás sin mi?, para mi eso ya es imposible, no soy capaz, eso es tener “pájaros en la cabeza”, lo he intentado pero no he podido, no me dieron la oportunidad …
Date cuenta que si empiezas a transitar un camino que parece despejado es porque no es tu camino, otros lo han trazado para ti.
Gemma Pitarch.